Andrew conocía cada etapa futura de su
vida. Su padre la había dispuesto. Iría a la universidad, ingresaría en
la misma hermandad a la que su padre había asistido, se licenciaría como
abogado, se casaría con alguna rubia, tendría hijos y trabajaría en el
bufete de la familia hasta su muerte. Tony sabía lo que le deparaba el
futuro. Estudiaría administración de empresas, aún con la oposición de
su padre. Se licenciaría, se haría cargo no solo de los negocias
familiares, sino que también ocuparía su lugar como líder de la manada.
Buscaría una compañera y tendría hijos. La universidad cambió las cosas
para ambos. Ingresar en la universidad no fue fácil para Andrew, no si
la única forma de agradar a su padre era aceptar ser un esclavo
comprometido bajo las órdenes de un extraño hombre de profundos ojos
oscuros.
Ser su esclavo cambió su vida.
Ser su dueño cambió su vida.
Pero nada será fácil; no cuando tu dueño es un hombre lobo que puede destrozarte. No cuando descubres que tu compañero de vida es un hombre y no la mujer que tu padre espera y sabes que la manada jamás aceptará algo así.
Ser su esclavo cambió su vida.
Ser su dueño cambió su vida.
Pero nada será fácil; no cuando tu dueño es un hombre lobo que puede destrozarte. No cuando descubres que tu compañero de vida es un hombre y no la mujer que tu padre espera y sabes que la manada jamás aceptará algo así.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario