1.- En las garras del amor
Brandon Swartz es un tipo bastante popular en su comunidad y es que al estar en una ciudad tan tolerante y receptiva ha tenido tiempo de crearse fama de jugador. Abiertamente gay y con un metro noventa y seis de altura, añadido su carácter volátil y temperamental, no hay quien le muestre rechazo son el temor a terminar como un excéntrico rompecabezas, que así es como Brandon deja a la mayoría de tontos que osan desafiarlo al enfadar al gran terrible grizzli.
Yelaím Wordik es un chico tímido, delicado, tierno, es el primero de su clase y empieza a ser bastante notorio entre los de su grado.
Yelaím ha sufrido acoso por parte de otros cambiaformas y eso lo ha marcado como un tipo aislado.
Su madre harta de los malos tratos hacia su hijo decide cambiarse a una de las comunidades cambiaformas con fama de tolerantes, seguras y pacificas.
Yelaím es un asustadizo cambiaformas ciervo, nada espectacular, nada imponente y con una terrible y casi enfermiza aversión por los tipos grandes, hasta que, en una muy mala broma, la envidiosa de su salón lo empareja con uno de los tres tipos más temidos de su nueva comunidad.
A veces un carácter volátil necesita mucho dulce y un alma tierna para poder tomar un respiro.
Y un dócil venado necesita necesita un guardián fuerte e imponente que le enseñe lo fuerte que puede ser.
2.- Maestro de un Lobo
Khalé Renning es un alfa justo, él ha seguido el legado de su padre al llevar el liderazgo de una manada tan diversa, tomándose el tiempo de escuchar y solucionar cada problema de sus integrantes, son tiempos de cambios y de implementar nuevas reformas que favorezcan no solo a él. Pero Todo su mundo diplomático se viene abajo cuando le toca hacerse cargo de un joven lobo que carga sus propias heridas.
César Brito no ha tenido una vida fácil. Su padre le ha hecho llevar una vida violenta y llena de abusos y carencias, Su padre murió algunos años atrás pero su legado permanece en su mente causando que se meta en más problemas de los que en realidad puede manejar, pero las buenas oportunidades no lo han abandonado, ahora deberá cumplir una condena de trabajos voluntarios en una casa hogar niños pequeños, lo peor es que el alfa personalmente vigila su proceso.
Todo es complicado para César, pero a veces una mano fuerte sirve para liberar y poner disciplina en la vida de un lobo herido.
Gracias 😁
ResponderBorrar